Fuente: Público
La estrategia parece empezar a cambiar. Después de una semana de intercambio de ciberataques de Anonymous a las webs de las empresas que han dejado de dar soporte a Wikileaks y de un ente desconocido a la propia web de la organización de Assange, comienza la Operación Leakspin.
Según un póster atribuido a Anonymous del que se hace eco The Guardian, el grupo que no quiere ser considerado como un equipo de hackers, llama a los internautas a buscar loscables más relevantes publicados en las últimas horas, grabar un vídeo leyéndolo y subirlo a YouTube añadiéndole los tags que pueden crear más visitas. «Desde Tea Party a Bieber» (por el niño-cantante-prodigio estadounidense). Por último, meter enlaces a esos vídeos en el mayor número de webs, foros o blogs posible.
En un editorial del mismo diario se apunta a una idea interesante: «Anonymous puede ser acusado de muchas cosas. Pero lo suyo es el equivalente digital a una acción no violenta de desobediencia civil. Provoca problemas más que daños».
Después de todo el revuelo y la repercusión mediática que ha tenido la irrupción de Anonymous, el grupo se vio obigado ayer a enviar un comunicado en el que se definían como «la conciencia de Internet«.
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